12 mar 2008

Y ahora qué?

Hace días que tengo el blog abandonado, intenté escribir pero no reuní las fuerzas necesarias. No me sentí bien los últimos días, sin energía, desganada, y siempre triste ... Me distancié de mis amigos, no tenía ganas de salir, pasé el fin de semana prácticamente encerrada. Sólo salí el domingo y para colmo de males lo vi.
Es increíble, cuanto menos querés encontrarte a alguien, ahí aparece. Si tan sólo no hubiera pasado primero por mi casa mientras las chicas me esperaban, si hubiéramos ido directamente al restaurant, si Male no lo hubiera divisado al otro lado de la calle, si ... si ... si ... Me saludó correctamente, lo respondí secamente, me hice la distraída buscando algo en mi bolso inmenso. Le di la espalda mientras hablaba con los demás, lo ignoré en una palabra. No sé si percató, no creo que se haya dado cuenta. Ya sé que fue una actitud infantil, no hace falta que nadie me lo diga porque me doy cuenta. Pero qué puedo hacer? no esperaba encontrármelo, reaccioné en forma instintiva, había mucha gente a nuestro alrededor y sentía ridículamente que nos podían estar observando. Si ni siquiera se debe haber dado cuenta que lo eliminé del Facebook, con todos los amigos y especialmente amigas que ha sumado entre sus contactos. Lo eliminé y sin embargo sigo entrando a su perfil para enterarme de algunas cosillas de su vida que por supuesto no me agregan nada y sólo restan. Tampoco se percataría si lo elimara del MSN, estoy segura. Me ve siempre conectada y nunca me escribe; ya no chateamos más los lunes a la noche, ya no pone más frases filosóficas, sólo muestra fotos de sus vacaciones o de sus salidas. Y no me escribe.
Volví a discutir con C por él. C no entiende qué pasó entre nosotros, por qué no lo quiero ver, no quiero escuchar hablar de él. Dice que si le cuento me podrá entender y quizás ayudar. Conociéndolo como lo conozco, dudo que lo pueda hacer, ni entenderme ni ayudarme. Pobre C, no es que tenga mala intención pero en general es incapaz de mirar más allá de sus narices. Y después de todo, yo tampoco sé por qué me siento así desde hace un mes. Desde la última vez que estuvimos juntos y luego de que hablamos sobre lo que había pasado en las vacaciones con R. A partir de ahí sólo hubo unos sms muy cordiales y luego el silencio, de ambas partes. Jamás volvió a escribirme, sólo una vez por el msn y fueron apenas unas líneas. El silencio que me aturde más que ningún otro ruido.
Bueno, basta. No tengo que hablar más de él. Y ahora qué?


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